El Ayuntamiento de Valencia modificará las sanciones y supuestos de la Ordenanza Municipal de Limpieza antes de las Fallas 2026 para reforzar el control sobre las conductas incívicas como orinar en la calle, el abandono de enseres y cualquier otra que afecte la limpieza, la salud pública y la protección del patrimonio histórico-artístico de la ciudad.
La nueva normativa establecerá multas que van desde los 750 euros para las infracciones leves hasta los 3.000 euros para las consideradas muy graves.
La cuantía de las sanciones dependerá del impacto que estas acciones tengan en la salud, la salubridad, la seguridad de las personas y el medio ambiente, tal y como se regulará en el nuevo texto
Entre las conductas que se sancionarán con mayor rigor se encuentran orinar en la vía pública, abandonar muebles y electrodomésticos junto a los contenedores, realizar pintadas en edificios protegidos, acumular restos de obras sin control, no recoger los excrementos de las mascotas y no limpiar los orines de los animales con agua adecuada.
Asimismo, se penalizará el vertido inadecuado de residuos en lugares no habilitados para ello, con el fin de prevenir la proliferación de escombreras ilegales.
La normativa también especifica sanciones para conductas que impliquen daño al patrimonio protegido, y toma en cuenta factores como la reincidencia, la intencionalidad del infractor y la gravedad del daño causado, incluyendo el impacto en bienes de valor histórico-artístico.
La vigente Ordenanza Municipal de Limpieza Urbana fue aprobada en 2009 y, tras 16 años de aplicación, el Ayuntamiento considera necesaria su actualización, explica en un comunicado.
En particular, se modificará el Título VII, que regula el régimen sancionador, para establecer un marco normativo más preciso y eficaz contra las conductas incívicas.
