El Niño Llorón no sabemos si es porque aquí entraban niños con hambre y salían con bocadillo de chorizo lleno hasta los topes por 2 duros, pero en pleno 2025 propone un viaje a la infancia con su particular política de precios.
Es uno de los ultramarinos más conocidos de Valencia que todavía conserva una curiosa costumbre. Recientemente, Joan Ruiz de @esmorzaret publicaba un vídeo en su perfil de Instagram donde desgranaba la dinámica de los bocatas de El Niño Llorón, que se valoran al peso en función de los ingredientes, que uno puede escoger en función del género disponible en sus vitrinas.
En el vídeo en cuestión, un bocadillo de chorizo por 1,50 euros parece una oferta imbatible por cualquier bar de la zona. Pero también podría haber sido de jamón, queso, mortadela o cualquier otro tipo de fiambre.
En su interior abundan también una selección propia de legumbres, vinos, conservas y productos de pequeños productores locales.
Está en el corazón de Ruzafa, y se mantiene como uno de los pocos negocios centenarios que todavía quedan por esta zona de Valencia.
En un reportaje de Valencia en Blanco y Negro, se detalla que este comercio no es de hecho natural del barrio. Si se tiene en cuenta su fundación y posterior traslado, El Niño Llorón tiene 120 años de historia. Antes de mudarse a Ruzafa se estableció en la zona del Mercado Central, donde también vendían cafés.
Lo encontrarás en el número 58 de la calle Russafa de Valencia.
