El Lignum Crucis o Vera Cruz, reliquia clave en torno a la Pasión de Cristo que se custodia en la Seo y que se expone en la capilla de San Pedro, para su veneración, junto con la Santa Espina, en el marco de la celebración del Año Jubilar Eucarístico del Cáliz de la Pasión.
El relicario del Lignum Crucis, que guarda un trozo de la Cruz de Cristo -uno de los más grandes que se conservan-, fue regalado por el papa Benedicto XIII, conocido como el Papa Luna, al Rey Martín el Humano, y llegó a la Catedral de Valencia el 18 de marzo de 1437, junto con otras reliquias, gracias al Rey Alfonso el Magnánimo, tal como se explica en el vídeo de la última “píldora cultural”.
Se trata de una pieza de orfebrería, realizada con cristal y plata sobredorada, con un formato de cruz doble patriarcal y un brazo transversal por encima del principal. El pie y el astil son añadidos posteriores al original. La pieza perdió su base entre los siglos XVI y XVII , y la actual está documentada en 1814.
El Lignum Crucis de Martín el Humano se expone, para su veneración, en la capilla de San Pedro de la Seo, al igual que la Santa Espina, puesto que, junto con el Santo Cáliz, son las tres reliquias claves en torno a la Pasión de Cristo que se custodian en la Catedral, vinculadas, de este modo, con el lema de este segundo Año Jubilar Eucarístico, que es “Cáliz de la Pasión”.