El proyecto invita a redescubrir la utilidad estética, medicinal y ecológica de las plantas habitualmente despreciadas
La Universitat de València (UV) ha inaugurado en la Facultat de Farmàcia i Ciències de l’Alimentació la exposición ‘Belleza ignorada’, un proyecto divulgativo que invita al visitante a detenerse, observar y valorar las plantas que normalmente son consideradas como simples ‘malas hierbas’. La muestra reivindica la utilidad, belleza oculta y papel ecológico fundamental de estas especies vegetales, frecuentemente marginadas en el discurso botánico popular.
El recorrido expositivo ofrece una mirada diferente sobre la vegetación espontánea que crece en bordes de caminos, solares urbanos, campos agrícolas o jardines, reivindicando su importancia en el equilibrio ecológico, sus propiedades medicinales tradicionales y su potencial estético.
Redefiniendo el concepto de “mala hierba”
El título mismo de la exposición cuestiona el concepto habitual de ‘mala hierba’, una denominación culturalmente cargada de prejuicios, que reduce estas plantas a molestias o amenazas para los cultivos agrícolas o el paisajismo ornamental.
Los comisarios de la muestra subrayan que muchas de estas especies:
- Favorecen la biodiversidad al albergar insectos polinizadores.
- Previenen la erosión de los suelos.
- Tienen propiedades medicinales ampliamente estudiadas en fitoterapia.
- Constituyen un recurso educativo, estético y científico desaprovechado.
Un enfoque divulgativo para públicos de todas las edades
La exposición, organizada por el Vicerrectorado de Cultura y Sociedad de la Universitat de València, está pensada como herramienta pedagógica para estudiantes, docentes, investigadores y el público general, combinando:
- Paneles informativos sobre la botánica de cada especie.
- Ejemplares vegetales vivos y preservados.
- Fotografías macro que revelan detalles invisibles a simple vista.
- Explicaciones sobre usos tradicionales y potenciales aplicaciones actuales.
El objetivo es sensibilizar al visitante sobre la riqueza oculta de lo cotidiano, mostrando cómo la ciencia, la estética y la cultura pueden resignificar elementos tradicionalmente ignorados del paisaje urbano y rural valenciano.
Malas hierbas: de la marginalidad al protagonismo científico
Muchas de las especies presentadas en la muestra son protagonistas silenciosas del entorno valenciano, como el diente de león (Taraxacum officinale), el llantén (Plantago major), la pamplina (Stellaria media) o la borraja (Borago officinalis), entre otras.
Algunas poseen propiedades medicinales documentadas durante siglos, mientras que otras están siendo actualmente estudiadas por sus potenciales aplicaciones en:
- La remediación de suelos contaminados (fitorremediación).
- La alimentación alternativa en dietas sostenibles.
- La cosmética natural.
- La agroecología urbana.
Valencia: un laboratorio natural de flora espontánea urbana
La muestra pone en valor la singularidad de Valencia como escenario privilegiado para la observación de estas especies, dada su situación climática mediterránea, su extensa red de huertas periurbanas y la coexistencia de espacios urbanos y naturales donde la vegetación espontánea encuentra múltiples nichos ecológicos.
El entorno valenciano es especialmente rico en flora adventicia, adaptada a los márgenes de la agricultura intensiva, los solares urbanos abandonados y las cunetas de carreteras, ofreciendo un patrimonio botánico oculto que suele pasar inadvertido.
Una llamada a la revalorización cultural de lo aparentemente insignificante
‘Belleza ignorada’ es, en definitiva, una invitación a mirar con otros ojos el entorno cotidiano. Frente a la tendencia a erradicar o controlar cualquier brote vegetal espontáneo en las ciudades o los campos, la muestra plantea la necesidad de:
- Reconciliarnos culturalmente con estas especies.
- Reconocer su papel en la resiliencia ecológica urbana.
- Aprovechar su potencial científico, educativo y artístico.
Un proyecto con vocación itinerante
Tras su estancia en la Facultat de Farmàcia i Ciències de l’Alimentació, la Universitat de València tiene previsto que esta exposición pueda itinerar por centros escolares, espacios culturales y otras facultades de la UV, ampliando así su impacto educativo.
En un momento de creciente preocupación por la biodiversidad urbana, el cambio climático y la necesidad de educar en la observación del entorno, ‘Belleza ignorada’ propone una lección de humildad científica y estética: no hay vida vegetal insignificante si sabemos detenernos a observ