Descubriendo la Vía Verde de Manuel: Un Proyecto en Desarrollo
La Vía Verde de Manuel es una ruta emergente en la Ribera Alta que actualmente se extiende por 3.2 kilómetros a lo largo de la antigua línea ferroviaria Xàtiva – La Pobla Llarga. Aunque todavía está en fase de desarrollo y no alcanza su potencial completo, esta vía verde promete ser una conexión vital entre los municipios de Manuel, La Pobla Llarga y Xàtiva una vez finalizada.
Características Actuales de la Ruta
Actualmente, la Vía Verde de Manuel ofrece un paseo sencillo y accesible que atraviesa el corazón de la localidad. La ruta, aunque corta, es interesante por su amplitud, una característica atípica comparada con otras vías verdes más estrechas. Esta peculiaridad se debe a que el camino aprovecha los terrenos liberados tras el reciente desvío de las líneas férreas urbanas.
Aspectos Culturales y Oportunidades Desaprovechadas
Uno de los puntos más llamativos de la ruta es la antigua estación de Manuel, que actualmente parece desaprovechada. Este espacio tiene el potencial de convertirse en un atractivo turístico o cultural significativo dentro del proyecto de la vía verde, añadiendo valor y funcionalidad a la ruta.
Desafíos y Desvíos Temporales
El recorrido enfrenta algunos desafíos, incluido el puente sobre el río Albaida que actualmente está en reparación y bloquea el paso directo. Como resultado, los visitantes deben desviarse temporalmente por el PR-CV 454, lo que implica un breve tramo adyacente a la carretera CV-575 antes de regresar a los caminos más tranquilos y pintorescos de la Xiqui senda de Enova.
Potencial Futuro
A pesar de los desafíos actuales y el trabajo en curso, la Vía Verde de Manuel tiene un gran potencial para convertirse en una importante arteria recreativa y turística en la región. El proyecto no solo mejorará la conectividad entre los municipios vecinos sino que también proporcionará una ruta segura y atractiva para peatones y ciclistas, fomentando un estilo de vida saludable y sostenible.
Conclusión
La Vía Verde de Manuel es un ejemplo de cómo los antiguos trazados ferroviarios pueden transformarse en valiosos recursos comunitarios. Aunque todavía está en construcción, la ruta promete ser un importante añadido al sistema de vías verdes de la región, invitando tanto a locales como a visitantes a explorar la hermosa Ribera Alta de una manera nueva y emocionante. Con el tiempo y las inversiones adecuadas, esta vía verde seguramente se convertirá en un destino favorito para amantes del aire libre y la historia local.
